Mostrando entradas con la etiqueta crossover. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta crossover. Mostrar todas las entradas

domingo, 14 de abril de 2013

¿Por qué el público huye de la música clásica? Cinco razones de peso.

La crisis de público de la música clásica no es un asunto nuevo. 
Desde hace ya décadas se asume que la música clásica está dirigida a una minoría: una minoría entendida, una minoría selecta, una minoría cultivada y una minoría además añosa. Todos estos clichés se aplican habitualmente a la gente que tiene costumbre de escuchar música clásica.

La falta de entendimiento entre la música clásica y la música popular además es recíproca, porque tanto empeño pone el común de las gentes en huir de las salas de concierto como los propios músicos "clásicos" en poner barreras que impidan que la gente llana acceda a comprender y amar la música denominada "culta".

Pero a fin de cuentas, ¿tan diferentes son la música clásica y la música popular?

Mi humilde respuesta es un rotundo NO

Tanto la una como la otra están hechas de lo mismo, de notas, armonías, ritmos, y las mayores diferencias estriban en la forma en la que una u otra nos presenta el resultado.

El Magnificat de J.S: Bach son notas musicales

El Bad Romance de Lady Gaga también son notas musicales


Por supuesto que la mayor parte de la música considerada clásica tiene el prestigio de haber persistido vigente durante siglos, (haber superado la prueba del tiempo) pero incluso la creación más genial de Bach o de Mozart no deja de ser lo que hemos dicho: notas, armonías, ritmos. Y quién nos dice que dentro de muchos años no seguiremos disfrutando igual que ahora con las canciones de los Beatles, por poner un ejemplo.

Pero volviendo a la pregunta del título de este post, ¿cuáles son esas razones por las que la mayor parte del público no tiene ningún interés por la música clásica?¿Es porque son todos unos ceporros sin sensibilidad alguna? Mi opinión es que no; es la forma en la que la música clásica nos es presentada la que hace que esté en franca inferioridad cuando tiene que "competir" con la música popular.

Ahí van cinco razones:

RAZON NUMERO 1: MUSICA Y VOZ
Al ser humano le encanta la música cantada y por eso el 99% de la música popular tiene como protagonista la voz. En la música clásica en cambio predomina la música instrumental y eso engancha menos al público. De hecho, las formas cantadas de la música clásica como la ópera o las obras corales son las que aún consiguen suscitar cierto interés entre el público general.


RAZON NUMERO 2: LAS FORMAS DE LA MÚSICA CULTA
A la gente común le produce auténtica alergia toda esa terminología de sinfonía, cantata, sonata, motete, lied, oratorio, suite, preludio, minueto, poema sinfónico, scherzo y otros muchos que me dejo en el tintero. La mayoría de la gente solo distingue entre A: Canciones y B: Músicas. Vamos, que es escuchar eso de Opus número no se cuántos y cambiar de canal.


RAZON NUMERO 3: LOS CANTANTES LIRICOS
Ya hemos aludido alguna vez en este blog a las diferencias entre las voces líricas y la forma de cantar de la música ligera. No vamos a negar aquí el esfuerzo y los años de preparación que exige el canto lírico, pero sí vamos a señalar que la mayor parte del público prefiere una forma de cantar más natural, más cercana a la voz hablada y sobre todo, sin ese exagerado vibrato que hace que a veces no se les entienda lo que cantan.


RAZON NUMERO 4: EL IDIOMA
Y hablando de no entender lo que se canta, ¿qué podemos decir de todas esas corales cantadas en latín, o de las óperas cantadas en alemán, en francés, o en italiano en el mejor de los casos? El mensaje es por lo menos el 50% del valor que tiene la voz humana, único instrumento que aúna música y texto. Cierto es que ahora suelen ponernos subtítulos, que ayudan y mucho a seguir una ópera, pero solo por un momento imaginemos un concierto de pop o de rock que necesitara subtítulos para enganchar al público.


RAZON NUMERO 5: LA EXPOSICION CONTINUA Y LA PROPAGANDA
Nunca amamos una canción o una pieza musical la primera vez que la escuchamos. La exposición repetida es la que hace que prenda en nuestro interior. Siempre me ha parecido ilusorio acudir a un concierto de música clásica, escuchar una obra que no hemos oído nunca antes y pretender que nos encante a la primera. Como mucho diremos que nos parece interesante, que promete o que nos recuerda a otra que nos gusta. En los conciertos de pop o rock el público acude con los deberes ya hechos y se sabe las canciones de pe a pa, porque las discográficas se encargan de promocionarlos extensamente en la radio, en las televisiones, en los anuncios. Si el público acude a un concierto de música clásica sin conocer nada de la obra, lo más probable es que se quede dormido a mitad del concierto y no vuelva al siguiente.

Classical Crossover
Por todas estas razones queremos rendir hoy homenaje en este blog a todos esos artistas que han intentado sortear este abismo aparentemente insalvable entre la música clásica y la música popular. Son conocidos como los artistas del classical crossover, término que podríamos definir como aquellos que adoptan fuentes o influencias de la música clásica para llevarlos al terreno de la música popular y alcanzar una imagen más comercial y llegar a un público más amplio.

He encontrado este enlace en el que lo explica todo maravillosamente bien, las distintas formas de hacer classical crossover, las tácticas que emplean las discográficas para explotar este mercado y también algunos ejemplos de los artistas más conocidos en esto de llevar la música clásica a las grandes masas, que son sobre todos cantantes, como el éxito universal de Los Tres Tenores (Luciano Pavarotti, Plácido Domingo y José Carreras)



Muchos puristas se rasgan las vestiduras, pero espectáculos así acercan la música clásica a un público que de otra manera no llegaría a conocer nunca la belleza de este aria de Puccini, (aunque muchos lo llamarán temazo en lugar de aria, lo que viene a ser lo mismo).

A la estela del éxito de los tres tenores, hemos tenido más tarde la oportunidad de conocer a Andrea Bocelli, cuyo caso es diferente porque es más bien un cantante de música ligera con algunos registros de tenor y canta canciones que no son de ópera pero se dan un aire. El éxito de Con te partiró fue también enorme.




El avispado productor de la compañía Sony Simon Cowell, conocido también por su labor de jurado en Factor X, vio enseguida el potencial comercial y creó el grupo Il Divo, un grupo de cantantes iniciados en el canto lírico, que no son italianos pero lo parecen (importante para el éxito), y que cantan canciones pop pero intentando sonar a ópera.

Yo no sé si esto se puede seguir considerando classical crossover o ya es descaradamente música pop para fenómeno fan, como se desprende de los comentarios del siguiente vídeo. Vosotros mismos podéis juzgar.