Hace unos días tuve finalmente la oportunidad de asistir a la representación del musical Sister Act en su versión española.
Creo que todo el mundo conoce el argumento de la película: una cantante de night club que es testigo de un asesinato y se esconde de sus perseguidores en un convento. Allí convierte el aburrido coro de la congregación en un coro vibrante y exitoso.
La película era muy divertida y el musical también. El contraste entre el estilo de vida de la cantante y el de las monjas proporciona un montón de situaciones divertidas. Simplemente ver a las monjas correr de un lado para el otro ya nos produce una sonrisa.
Pero además la música tiene un papel aún más importante que el humor. En la película el coro hacía versiones corales sorprendentes de canciones conocidas del soul adaptándolas a la temática monjil. En Sister Act 2 se potenció aún más el aspecto musical contratando a Mervin Warren de Take 6 para las adaptaciones de las canciones y a Lauryn Hill como la alumna conflictiva que descubre su talento como cantante.
El musical hace tabla rasa de todo esto. Se componen canciones totalmente nuevas y originales y el encargado de ello es nada menos que el legendario Alan Menken, compositor de todas esas canciones maravillosas de las películas de Disney. Aquí os traigo un video del propio Alan Menken cantando un puñado de esas canciones (tiene muchas más).
La música de Sister Act el musical es, como no podía ser de otra manera, fantástica, pero la verdadera sorpresa al ver el montaje de la obra en España es la protagonista Mireia Mambo Bokele, una artista que reúne en mi humilde opinión todo lo que es necesario, energía, simpatía, carisma, voz, técnica vocal, capacidad para el baile, para convertirse en una gran estrella de la escena musical.
Mireia consigue que durante la obra no nos acordemos ni una sola vez de Woophi Goldberg.
Os traigo también un link a una entrevista en la que la propia Mireia nos cuenta cómo empezó su carrera musical y sus primeras experiencias en el teatro musical, tanto en Londres participando en el montaje de "Charlie y la fábrica de chocolate" como después en España con la aclamada "El rey león".